Oración acatista de acción de gracias en honor a la Madre de Dios
Recibir, o Potente, Nuestra Señora y Nuestra Señora,
Madre de Dios, estos himnos de alabanza,
que te cantamos con gratitud,
somos tus sirvientes indignos.
Elegido de entre todas las edades, sobre todas las criaturas
cielo y tierra has resultado ser mayor.
Contigo, el Señor de los ejércitos está con nosotros.
A través de ti hemos llegado a conocer al Hijo de Dios y nos hemos llenado
con cuerpo santo y sangre pura.
Por eso eres bendecido de generación en generación,
alabado por dios, mayor que los querubines
y más venerable que los serafines.
A esta hora, para la gloria de la Santísima Madre de Dios,
sigue orando por nosotros, indigno de tus siervos,
para que seamos libres de todos los malos pensamientos y todas las desgracias
y ser salvo de toda malicia satánica.
Hasta el último momento, intercediendo por nosotros,
mantennos impecables.
Porque están protegidos por tu intercesión y por tu protección,
Dios uno y trino, Creador del universo
damos gloria, Hola, homenaje y acción de gracias
ahora y siempre y siempre y siempre.
amén.